El colapso de la civilización maya
Los mayas fueron una de las civilizaciones más importantes del continente americano y como muchas otras, desaparecieron dejando un importante, aunque no demasiado extenso, legado histórico. Han sido muchos historiadores y especialistas los que han elucubrado sobre cuál fue la posible causa de la desaparición de este pueblo y algunos aseguran que se debió a la destrucción del medio ambiente, algo provocado por la propia civilización a causa de la mala administración de sus recursos.
El arqueólogo estadounidense Richard D. Hansen, uno de los más reputados investigadores del mundo en todo lo relacionado con los mayas, declaró hace no demasiado tiempo que: “Los mismos mayas dañaron su propio entorno. Lo destruyeron. El impacto del daño al medio ambiente fue tan fuerte que provocaron el colapso”.
El propio Hansen fue el descubridor en el año 1978 de la Cuenca Mirador, considerado como el complejo más grande de la civilización maya, el cual abarca 51 ciudades donde se encuentran las pirámides más grandes construidas por esta civilización hace más de 3.000 años.
Está emplazada en una zona rodeada de selva dentro del departamento de Petén, en la frontera con México, pero perteneciente a Guatemala. Cuenta con más de 2.169Km², donde se han encontrado (hasta el momento) 51 ciudades mayas, las cuales estuvieron interconectadas entre ellas gracias a un sistema de carreteras, algo inaudito en aquella época.
Poco a poco Hansen fue reconstruyendo, según las evidencias científicas con las que contaba, la civilización maya desde sus orígenes, reconociendo su desarrollo político, económico, cultural y arquitectónico hasta poder convertirse en todo un imperio, uno de los más importantes de la historia de la humanidad.
Según explicó, los mayas consiguieron desarrollar el primer Estado económico dentro del continente americano. Además allá por el año 1.500 antes de Cristo formaron el primer Estado político, con un enorme desarrollo económico y grandes poblaciones, pero a causa de un error fueron ellos mismos los que provocaron su propio colapso unos 150 años después de Cristo, momento en el que comenzaron a sufrir deforestación e importantes sequías.
Esta situación hizo que los propios mayas comenzasen a abandonar la zona donde siempre habían vivido y a diseminarse por diferentes partes del continente americano. Lo que Hansen no se explica es por qué no regresaron cuando todo fue cambiando a mejor, supone que simplemente no volvieron debido a la escasez de recursos.
A pesar de que eran humanos y cometieron errores, hicieron lo que mucha gente está haciendo actualmente, abusar de los recursos que tenían a su disposición, dejándose llevar por un consumismo desenfrenado, gastando más de lo que tenían y prefiriendo erigir grandes construcciones sin pensar en las necesidades reales de la gente, lo que provocó que también hubiera hambruna, hasta que se acabó todo.
Aunque son plausibles, aún hay muchas incógnitas sobre cuál pudo ser exactamente la causa o causas de la desaparición de toda una civilización, que seguramente no se trataría de 500, 1000 ó 200.000 personas sino muchas más, convirtiendo a la civilización maya durante toda la historia en todo un misterio que aún se está estudiando en nuestros días.